Aeschynanthus colgante.

Esta vetusta planta de Aeschynanthus colgante Tornado (aeschynanthus lobbianus) , que en algunos viveros se confunde con la Columnea, lleva ya unos años sobreviviendo en el jardín dentro de su viejo tiesto y parece ser que al final le hemos encontrado "su sitio" y aquí está, a mediados de este caluroso otoño, mostrando su mejores galas, aunque aún le queda bastante para recuperarse de los estragos sufridos durante tantos años... Yo sigo confiando en que lo lograremos juntos y seguirá siendo una gran fuente de satisfacciones...

Las fotos están hechas con una nueva cámara que he adquirido hace unos pocos días; la Canon Powershot SX280 HS, y aún estoy de prácticas, aunque no le acabo de encontrar la suficiente viveza a los colores; tendré que seguir bicheando y aquí se irán viendo los resultados...

Los entrañables geranios...

Geranio rojo, acuarela de Wanda Zuchowski-Schick

Sin duda alguna no hay otra planta como esta, sobre todo es España, para alegrar cualquier rincón del jardín, de una terraza o balcón, e, incluso, del más escondido rincón de algún patio olvidado...

Nuestra memoria colectiva asocia, rápidamente, un balcón florido con la imagen de geranios y gitanillas llenas de colorido... Pero también acude a nuestro recuerdo la fragancia inconfundible de sus hojas cuando las acariciamos con nuestras manos... ¡Es nuestra infancia la que de nuevo regresa a nosotros!...

Parece ser que este año los hados me han sido favorables y nos están regalando esta explosión de perfumes y vibrantes colores, pues, entonces, ¡disfrutemos mientras podamos!...

Sellos 003.

Sigo rellenando el tiempo con entradas de esta índole hasta que las circunstancias me dejen, de nuevo, dedicarme a mis blogs...

Nueva hoja de mi álbum de sellos dedicados a las plantas y flores... De nuevo una serie de Albania...

Las 'brujitas' de mi abuela...

Freesia White, by Sallie (Sarah).

Aunque ya hace muchos años que murió mi abuela, algunos de sus nietos hemos mantenido, a lo largo del tiempo, en buen estado parte de los bulbos que le eran tan queridos, ya que por entonces, primero en patios y luego en macetas colocadas en pequeñas terrazas de bloques de pisos, sus flores anunciaban la cercanía de la primavera con su color blanco, con mácula amarilla, y su agradable olor...

Y aquí están las flores de la freesia alba que, a primeros de febrero ya vienen anunciando una primavera que, si no me equivoco, será espectacular en nuestros jardines, patios y terrazas...

Pronto comenzaremos a disfrutar de toda una pirotecnia de colores ofrecida por los bulbos de primavera que ya han comenzado a cubrir con sus hojas verdes la superficie de nuestros pequeños terrenos... A disfrutar, pues, que esto, aún, no nos lo pueden arrebatar...